Robert Fripp & Brian Eno - No pussyfooting [1973]
Algunas personas se preguntaran, ¿por que Eno es Dios?, y esa respuesta esta en este disco.
Como explicar con palabras lo que estos dos genios lograron con guitarras, sintetizadores y horas de manipulación de cintas, solo los fuertes estados de alteración mental y los trances más profundos pueden simular un estado tan placentero y tan complejo como el logrado en No pussyfooting.
Las creaciones en este disco no son canciones, son criaturas con la complejidad de un ser vivo, desde su nacimiento estos seres evolucionan, mutan, crecen, se vuelven mas y mas complejos, todo es parte del lento desarrollo de la vida, toman conciencia de si mismo y cuando desean que ese estado dure eternamente, mueren con rapidez, dejando una insatisfacción, la de por que esos 20 minutos no duraron 20 años.
Es así como el pro-ambient mas visceral se desarrolla con la mirada minimalista que solo un visionario podría tener, en “the heavenly music corporation” que comenzó como un proyecto entre Fripp y Dios mientras el segundo grababa con Roxy music el primer disco de la banda, Eno y Fripp comienzan sus primeros pasos en la experimentación con cintas, loops, filtros y procesos, alcanzando un clima de suma paz, una lenta mutación que es apenas perceptible empuja el sonido con el pulso de la perfección, y cuando creíste haberte acostumbrado, en realidad ya cambio, para dar lugar a nuevas etapas, así como un ser vivo después de lentos cambios sigue siendo siempre el mismo. Fripp deslumbra con melodías impredecibles e inquietas, pasando de la euforia a la contemplación, las guitarras se deslizan por un colchón de sonidos y a medida que adquiere experiencia deslubran con la sabiduría del caos.
Todos los procesos que Dios y Fripp desarrollan en “the heavenly music corporation” conocen el abuso en “swastika girls”, esta criatura tiene la capacidad de generar la misma repulsión que obsesión, generando un clima de placer paradójico, una superposición de sonidos, que se desarrolla desde su nacimientos hasta su muerte como un organismo que repta, se alimenta, excreta, y muta a una velocidad imperceptible, que acostumbra primero y deslumbra después. Las distintas líneas, loops y pads de guitarras comienzan a aparecer como extremidades con la paciencia y precisión de la naturaleza, que agregan complejidad y desarrollo. El minimalismo de los acompañamientos y la genialidad de las melodías de Robert Fripp hacen de este ser una de las interpretaciones mas placenteras de la vida:
Es la ciencia a favor del arte,
es biología, música y futuro,
es la mismísima concepción de un DIOS:
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Robert Fripp & Brian Eno - No pussyfooting [1973]
